Los clásicos depósitos de agua antincendios de Nueva York. La foto es desde la ventana de la cocina. Más fotos de la Gran Manzana en el álbum que estoy montando en el Flickr:

New York City 07

Ayer tocó ronda por varios garitos del East Village: el Lit Lounge, El Manitoba's y ya en el Lower East Side el Arlene's, todos con un ambiente muy underground y rocanrolero, con varios conciertos programados para esa misma noche. Está claro que si me quedara a vivir aquí estos serían mis sitios de salir los findes. Luego nos trasladamos a otro local por el Downtown y la noche siguió hasta agotar los recursos económicos y mentales.

Los días anteriores se han repartido entre visitas a algún museo, brunchs en los Starbucks, paseos por la Quinta, Sexta y Séptima Avenida y algunas compras realizadas en los dos trillones de tiendas que hay en estas calles. Nueva York no es excesivamente cara pero hay tanto de todo que cuando te das cuenta te has gastado un pastón, ahora, merece la pena, que viajes como éstos no se dan todos los días.

Hoy toca cine 3D en megasupersala de las de aquí y mañana fiesta temática en el piso dedicada al american mullet -si, el famoso corte de pelo a lo MacGyver que se pedía en los 80s en las peluquerías del barrio- con una asistencia estipulada en más de 30 individuos. Espero sacar fotos que hablen por sí solas y colgarlas luego por aquí. He visto algunas fotos de otra fiesta dedicada al mismo tema y lo que pase mañana puede dar para llenar folios. Me da igual, I'm god damn and ready with my brand old mullet!, uh uh..

Etiquetas: fotografía, nyc, viajes

Twittear
0 aprensiones

Luna Lounge, Brooklyn, New York.

Ladies and gentlemen... Julieta y los Lametones!! si si, Juliette Lewis, la mismita niñita adolescente que nos puso a todos las hormonas en def con one en el Cabo del Miedo y más tarde pegando tiros en Asesinos Natos, pues ella la misma que viste y calza, ahora reconvertida en íncubo rocanrolero, fue la que nos zarandeó junto a su banda el viernes en el Luna Lounge de Brooklyn, en Nueva York, a base de rock and roll del bestia, ufff.

Pero vayamos por partes, después de atravesar medio Brooklyn en autobús –tamaña barriada- llegamos a la sala –que recordaba al mítico Surfer Rosa de forma acojonante- con tiempo de sobra para ver a los dos grupos teloneros: The Suffrajets y Scissors for Lefty, ambos notables cumplidores de su tarea introductoria. Más rockeros los primeros, se marcaron un espectáculo corto pero decididos a dejarse notar con la actitud de su front-girl y su imagen salvaje a lo afro que no se contuvo ni un segundo sobre el escenario. Alternó micro y violín, sacando voz y rabia de entre ruidosos riffs y contundentes redobles.


Luego vinieron las Tijeras para el Zurdo que aunque sonaron menos distorsionados al principio, fueron pasando de más bailongo a sonidos más salvajes para terminar a lo grande pero sin dejar ni un segundo la línea melódica, como si juntáramos entre otros a Fran Ferdinand con la Beta Band y The Cure a la vez.. si si, deliciosamente extraño. Varias bajadas al público y carisma de cantante, junto a un enérgico y variado repertorio que no decayó en ningún momento, hizo que perfectamente pudieran haber sido ellos los que firmaran la cabeza del cartel, aunque eso estaba reservado, claro está, para la pequeña gran Julieta y sus chicos...


Pues si, con la sala ya abarrotada, aparecieron The Licks en escena con Juliette al frente, la perfecta lolita indomable, la chica problemática de sus películas, hembra en peligro y hembra peligrosa, bonitas curvas con movimientos de reina del capricho que en escena desvela a Iggy Pop, Mick Jagger y Lux Interior como padres putativos. Aquí se va a liar, fue lo primero que se me vino a la cabeza al verlos en escena, oir el primer rasgeo del guitarrista y ver la primera contorsión de la vocalista. Llevo siguiendo al grupo más o menos un tiempo y algunas canciones me eran familiares y otras no tanto –soy un desastre para recordar títulos-, pero la actitud kamikaze que en su día intuí debían gastar en escena quedó más que confirmada en los primeros minutos y marcó todas y cada una de las canciones que fueron tocando. Saltó al público varias veces y pasó por las manos de casi toda la sala que la devolvía una y otra vez al escenario. Como actriz que es espero que tuviera la jeta bien asegurada porque cuidarse no se cuidó nada. Sacó un repertorio generoso en minutaje y aunque eché en falta American Boy, que es una de mis favoritas y la que me acercó al grupo en su momento, todas sonaron salvajes y potentes, muy Stooges, muy Raw power, muy rock and roll..
Para el bis salieron todos descamisados y ella con un exiguo top que dejaba ver un cuerpito que bien daría para llenar otro post con los detalles. Continuaron con más repertorio de la misma calaña y para terminar fueron directamente, ya sin control ninguno, a por su You speak my language, quedándose después al final en el escenario ella sola algunos segundos más mientras cogía las manos del público, entre la cuales estaba afortunadamente la mía –estuve casi todo el concierto en primera fila- que agarró la última y además besó a modo de despedida antes de perderse por un lado del escenario. Mejor rúbrica no pudo ser. Al final sensación de satisfacción total. Julieta es menudita pero lo que vi fue grande, si señor, muy grande. Definitivamente, Juliette, sí que hablamos tu lenguaje y vaya si nos encanta...

Etiquetas: conciertos, nyc

Twittear
0 aprensiones